Tratas de revisar para atrás todo lo que has vivido, todo a lo que te a lo que te has opuesto y entonces ocurre algo extraordinario!... Vuelves a lo básico y tienes la necesitada imperiosa de escuchar la Novena Sinfonía de Beethoven... Como un calmante como lo que va a expiar tus pecados, aunque hayan sido de exceso, de exceso de cariño de entrega.... Quieres recuperarte, quieres sentirte bien... Y esa parece la medicina indicada... Y piensas.... ¿De dónde viene esto?... Y aparece la imagen de papá que siempre en los momentos memorables y bajo un cielo estallado en la Laguna después de gritar todo pulmón "Afrodita" invocando a la diosa del amor que no lo abandone nunca comienza con sus acordes la "Novena"
Esta noche sin invocarla a Afrodita necesito escuchar la Novena con la esperanza que heridas se cierren, que sepas que estas plantando en mi corazón, que fui capaz de contarte lo que me dolía... Y ojalá lo comprendas.
No hay pendencias no hay obligaciones sabes donde estoy parada y aún cuando no creo que conozcas mi fragilidad, porque siempre parecí fuerte, las tengo, y mi corazoncito quiere lo mejor para ti, pero tampoco puedo olvidarme de mi.
Un abrazo y un hasta siempre...
Ubicación:Las Condes,Chile